VEN, PROMETIDA: CÓMO DECIR LA FORTUNA CORRECTAMENTE

12 maneras de mirar hacia el futuro y pedir un deseo durante la Navidad (del 7 al 17 de enero)
Desde principios del siglo X, los eslavos orientales celebraban ritos especiales en la Nochebuena (la noche del 6 al 7 de enero) tras la aparición de la primera estrella. Los días siguientes se dividían convencionalmente en dos partes: las «noches santas» (la primera mitad, dedicada a las predicciones alegres) y las «noches de miedo» (la segunda, dedicada a las peligrosas y fatídicas). Las predicciones realizadas la noche del 14 de enero (la noche de Vasiliev) se consideraban especialmente proféticas.
Un espejo (un objeto oculto, una especie de portal para la comunicación con los espíritus) y velas de cera capaces de "recordar" ciertas imágenes eran atributos obligatorios de la adivinación navideña. Pero uno de los mejores lugares para celebrar las sesiones es... ¡una casa de baños! Los lugares "en la intersección" también se consideraban místicos en la Rus: umbrales, puertas, rincones de la casa. El toque final era una piel de buey, sobre la que había que sentarse para mayor persuasión.
También había reglas estrictas, conocidas por todas las jóvenes curiosas. Por ejemplo, durante la sesión estaba prohibido cruzar los brazos o las piernas, pues se confundiría el destino. Los anillos, las cadenas y los cinturones estaban prohibidos; debían quitárselos, y el cabello, suelto.
ADIVINACIÓN EN LAS "TARDES SANTAS"

1. Muchas mujeres tienen historias divertidas relacionadas con esta adivinación navideña fácil de realizar para sus prometidos. Para averiguar el nombre de su futuro esposo, debe salir después de la medianoche y preguntarle al primer hombre que se cruce en su camino cómo se llama. Según la leyenda, este es el nombre que el destino le ha asignado.
2. Otra forma, no menos curiosa, de adivinar el futuro del novio es lanzar la bota izquierda (unas Manolo Blahnik nuevas, unas zapatillas o unas botas de fieltro) por el umbral. Adonde apunte, allí saldrá.
3. Un pasatiempo popular entre amigas es vendarle los ojos a una de las "conejillas de indias", hacerla girar y detenerla frente a una mesa. Sobre ella, coloca primero objetos que representen al futuro amante: pan (será rico), sal (un gruñón), una botella (un borracho), un espejo (un narcisista), una cuchara (un cocinero) y una cebolla (derramarás muchas lágrimas a su lado). El talismán que señala la chica es el prometido. ¿Por qué no diversificar el viejo ritual con las llaves de un apartamento o una foto del soltero empedernido Leonardo DiCaprio?

4. Un método de adivinación para quienes aún dudan del futuro de su pareja. (¡Pero no al lado de alguien que se afeita la cabeza!) Toma prestado un cabello de tu pareja y prepara uno propio. Vierte agua en una taza, añade una pizca de sal y azúcar y luego echa los "trofeos". Si ambos cabellos están juntos por la mañana, también vivirán felices para siempre; si están muy separados, es mejor buscar a otra persona para tu mano y corazón.
5. Las Cenicientas de corazón pueden elegir el método del arroz para adivinar el futuro. Coloquen la mano, con la palma hacia abajo, sobre un recipiente con granos y pidan un deseo; tomen un buen puñado, viértanlo en una servilleta y cuéntenlo. Un número par de granos de arroz significa que su sueño se hará realidad; un número impar significa, por desgracia, que esta vez no.
6. Vierte agua en un plato hondo grande y pega tiras de papel con eventos deseados en sus bordes: desde una boda hasta un ascenso profesional. Pega un trozo de vela (idealmente, una vela de cumpleaños) a media cáscara de nuez: este será el barco de tu destino. Colócalo en medio del "mar" y espera a qué trozo de papel (léase: evento importante) se anclará.
ADIVINACIÓN EN "TARDES DE MIEDO"

1. Un método de adivinación para mujeres fuertes e independientes que tienen un gato en casa. Deja a la mascota en otra habitación, pide un deseo y llámala. Si el gato cruza el umbral con la pata izquierda, puedes frotarte las palmas con satisfacción; todo se cumplirá; con la derecha, muchos obstáculos se interpondrán en tu camino.
2. Al menos una vez en la vida, toda mujer probablemente ha recurrido a este método de adivinación, y no solo durante la semana de Navidad. Toma tu libro favorito o cualquier otro que encuentres, nombra la página y el número de línea (arriba o abajo) al azar, ábrelo y lee tu predicción.
3. Para los más intrépidos. La sola descripción de esta adivinación provoca escalofríos: a medianoche, la joven se sienta en la oscuridad entre dos espejos, enciende velas y comienza a observar la "galería de reflejos" para ver el rostro del novio.
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4. Una versión más democrática y menos aterradora de la adivinación anterior. Antes de acostarte, recita un conjuro sencillo: «Quien sueñe conmigo, que aparezca en mis sueños». ¿Quieres potenciar el efecto? Teje un puente convencional con varias ramitas finas y colócalo debajo de la almohada, pero con otras, diciendo: «Quien sea mi prometido, quien sea mi disfraz, me llevará al otro lado del río». ¡Que tengas sueños placenteros y picantes!
5. ¿Qué clase de adivinación tendrías sin cartas? Antes de acostarte, pon cuatro reyes debajo de la almohada y, por la mañana, sin mirar, saca uno. El palo de picas significa que el novio será viejo y celoso; el de corazones, joven y rico; el de tréboles, un militar o empresario; y el de diamantes, simplemente el más codiciado.
6. Una opción para mujeres con imaginación desbordante. Vierte leche en un plato y vierte cera derretida de una sola vez, tras el umbral. Evalúa el resultado: una cruz: problemas financieros; una flor: un hombre amado (o, quién sabe, ¡una boda!); una persona: un amigo, y un animal: un enemigo; rayas: viajes y mudanzas; una estrella: éxito en el trabajo.
Basado en material de ELLE.RU