Nunca desperdicies tu tiempo y energía en aquellos a quienes no les importas.

Andrey Kurpatov, psicoterapeuta, escritor y columnista activo de muchas publicaciones, ha definido para sí mismo reglas de oro para la vida.
Nosotros sugiere mirarlos más de cerca: quizás te convengan también.
- Nunca transfieras la responsabilidad de lo que sucede en tu vida a los hombros de otras personas.
Entiendo que la tentación es grande, pero ten compasión de ti mismo. Solo cuando aceptes internamente esta decisión: «Soy el autor de mis fracasos y el creador de mis éxitos», cobrarás fuerza. - Acepta el hecho de que el pasado ya no se puede cambiar, ya pasó.
Solo tenemos control sobre nuestro futuro, que depende directamente de lo que hagamos ahora, en cada momento. No esperes a que el futuro te sonría; haz que no pueda evitar sonreírte. - Deshazte de la ilusión de que puedes cambiar a otras personas.
Subconscientemente, todos sufrimos de esta ingenua ilusión y, como resultado, sufrimos en el sentido más estricto de la palabra. Las personas cambian solo por las circunstancias; todo lo demás es solo un engaño de la percepción. Permíteles ser diferentes, y en algún momento incluso empezarás a disfrutarlo. - Los demás necesitan que seamos fuertes.
Débiles, cansados, sufriendo, infelices: nadie nos necesita. Si fingen que las cosas son diferentes, simplemente te están engañando. ¡No te rindas! Acepta la infalibilidad de esta regla, respira hondo, sacúdete y comprenderás que no hay nada de qué preocuparse. - Todas nuestras acciones tendrán ciertas consecuencias.
Y, en esencia, siempre elegimos no lo que haremos, sino lo que sucederá como resultado de nuestra acción. Por lo tanto, antes de hacer algo estúpido, piensa bien en sus consecuencias, y así habrá mucha menos estupidez en tu vida. - No vivas como si fueras a vivir para siempre.
Todos moriremos. Esto es inevitable y un hecho médico. Puedes sufrir y sentirte atormentado por esto, o puedes esforzarte y dejar este tema de una vez por todas. No vivas como si fueras a vivir eternamente. Y no vivas como si fueras a morir mañana. Considera ambas afirmaciones y encontrarás tu propia receta para una vida feliz. - Haz lo que sientes que es importante en tu interior.
Si te preguntas sobre el sentido de la vida, probablemente sea solo depresión. No es el "sentido de la vida" en sí lo importante, sino sentir que vives una vida plena. Haz lo que sientas importante en tu interior. No olvides repetirte eso. Y no persigas el éxito. Si solo haces lo que sientes importante, el éxito te alcanzará. - Nunca malgastes tu tiempo y energía en aquellos a quienes no les importas o, peor aún, en aquellos que no te aman.
Hay muchas personas en este mundo con las que es un placer vivir. Simplemente no tienes que ser cerrado ni desconfiado. Créeme, siendo abierto y amable, no pierdes nada.